Suele ocurrir que las etiquetas, más que ayudar, únicamente sirven para confundir y parcelar, muchos amantes de la música no se acercan a algunos discos porque no son del género que suelen consumir, mientras que en otras ocasiones, es la prensa o esa otra crítica ‘no especializada’ que escribe en blogs (y podemos incluir en el saco a esta humilde web, ya que para muchos no sabremos de lo que escribimos, y está bien que piensen así) la que añade más confusión. Por tanto, es necesario desnudarse de prejuicios para prestar atención a este nuevo proyecto de Steve Wiener (Negative Bliss y Ashenheart), Am I in Trouble? que debutan con este homenaje de naturaleza idiosincrática desafiando subgéneros. Desde sus primeros días en la peculiar escena del black metal de los años 2000 y su multitud de ramificaciones, Wiener, siempre innovador, se ha adentrado con valentía en un paisaje sonoro que podría llevarlo a lo más alto de las listas o al underground más oscuro, demostrando que su amor por el arte supera con creces su interés económico. “Spectrum” (2025), el álbum debut de Am I in Trouble?, captura el difícil equilibrio entre el progresivo y la intensidad dramática de los elementos post-metal, sus canciones incorporan una amplia paleta de colores de influencias del metal extremo, mezclándolas, sin esfuerzo, a lo largo del espectro al que parece hacer referencia el título. Canciones como “White” y “Black” presentan melodías oscurísimas, propias del black, con un toque melancólico inspirado en Agalloch, mientras que “Pink” y “Blue” exploran paisajes inquietantes con tintes progresivos, no serán pocas las veces que escuches este álbum y su luminosidad te recuerde, sin embargo, a la melancolía de Deafheaven. Este enfoque diverso resalta la capacidad de Wiener para fusionar la pasión con la experimentación, cuando su interpretación vocal también se adapta a las dinámicas del álbum, oscilando entre los gritos desgarradores y voces melódicas, evocando no sólo a los mencionados Agalloch sino también a Arcturus y los momentos más feroces de Emperor, en un álbum repleta de colaboradores que, muy al contrario de lo que se podría pensar, no restan ni un solo ápice de coherencia al estilo pero sí frescura a algunas maneras que, de no tratarse de Wiener, podría llegar a oler tan húmedo y rancio como los sótanos de la mismísima Helvete.
Pese al amor por el black metal, lo que más destaca de “Spectrum” (2025) es su inesperado sabor tranquilo en mitad de la tormenta; desde los tonos acústicos y melancólicos de “Yellow”, hasta el silbido alegre de “Green,” el álbum crea una atmósfera serena pero enérgica. Un equilibrio que empapa a canciones como “White,” donde melodías fugaces se transforman en el clímax de las guitarras, mientras las voces melódicas evocan la alegría del mejor trabajo de Lars Nedland en composiciones ricas en texturas que le sirven a Wiener para adentrarse en la aspereza de los momentos más abrasivos en “Pink” y “Black”, aumentando el contraste, como ocurre con el silencio de “Red”
Sin embargo, con poco más de treinta minutos de duración, “Spectrum” (2025) transmite las hechuras de un proyecto en el Wiener podría haber ampliado aún más la paleta de colores para explorar completamente su rango creativo. La tinta del black metal añade el toque de experimentación e irreverencia del que el álbum hace gala y, aunque las atmósferas tendrían que haber creado más tensión para estallar en esos momentos, Wiener consigue que el disco nos inunde por completo, como oyentes, dejándonos con ganas de más. Am I in Trouble? debutan por todo lo grande, insinuando un potencial aún mayor para un brillante futuro.
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