Me suele ocurrir que hay bandas a las que admiro y respeto, pero con las que soy especialmente crítico, quizá porque son esas de las que más espero y con Draconian me ocurre que las expectativas eran muy altas tras "Sovran" (2015). En aquel había melancolía y sensibilidad, claro que sí, pero con profundas descargas de telones metálicos a cargo de inexpugnables muros de guitarras, era gótico, pero también doom. Con “Under A Godless Veil”, lo que me ocurre es que, a pesar de las guturales del diálogo de “Sorrow Of Sophia”, parece que son las fuerzas del bien son las que ganan a las del mal, parece que la voz femenina de Heike gana en presencia a la de Anders. El resultado es bello, no podía ser de otra manera en Draconian, los suecos saben perfectamente lo que hacen y son sinónimo de calidad, pero la victoria de Heike, el exagerado melodrama en arreglos, los lentísimos tempos y la ausencia de guitarras, logran que “Under A Godless Veil” se convierta en un parsimonioso paseo repleto de drama impostado, en el que hay momentos (“The Sacrificial Flame”) en el que uno llega a agradecer el atisbo de metal, la profundidad en las guitarras, pero cansa que Heike sea la melodía y Anders el recitado, cuando no -menos original- el gutural.
La misma que derrochan en el cierre que es “Ascend into Darkness” y sus nueve minutos en los que cabe un poquito de todo lo que he echado de menos en “Under A Godless Veil” y no he tenido en canciones como “Night Visitor” en la cual, por ejemplo, Heike brilla con luz propia gracias a su bonita voz pero, en definitiva, lo que separa a la amargura sensible de Trees of Eternity o los mejores y más góticos Paradise Lost, de una banda como Within Temptation (con todo mi respeto hacia sus fans, inversamente proporcional a su gusto). Una pena, de “Under A Godless Veil” salvo algunas canciones y la constatación de que Draconian son incapaces de firmar un mal álbum, pero no puedo evitar volver a “Sovran”, escuchar una pieza como “The Wretched Tide” y sentir que algo se ha perdido por el camino.