SETLIST: Over The Wall/ The Haunting/ Rise Up/ The Preacher/ A Day Of Reckoning/ First Strike Is Deadly/ Eerie Inhabitants/ Trial By Fire/ Into The Pit/ The New Order/ Practice What Your Preach/ Disciples Of The Watch/ D.N.R. (Do Not Resuscitate)/ 3 Days In Darkness/
Despertábamos el pasado sábado con la desagradable noticia de la cancelación del concierto de Testament en la sala París 15 de Málaga, al parecer tras diversos fallos en el sistema eléctrico que hicieron imposible la actuación de una de las bandas más emblemáticas del thrash metal de la Bay Area. Es una pena que en pleno siglo XXI todavía sucedan estas cosas en un país, en principio "adelantado" y "moderno" como España, ya que por desgracia no conducen a otro fin que no sea el de empobrecer aún más la, ya de por sí desmejorada, imagen que los artistas internacionales tienen de nosotros. Lo que está claro es que al final en este tipo de situaciones siempre perdemos los mismos, siempre nos llevamos los palos los que de verdad amamos y sentimos con el corazón y el alma esta música. Sabemos de gente que recorrieron muchos kilómetros para estar el pasado Viernes en Málaga y para poder disfrutar de una de sus bandas favoritas o de muchos otros que se hacían una mínima ilusión (y por qué no decirlo, "esperanza") de tener por fin en su ciudad un concierto de notoria relevancia y envergadura, que raramente puede verse fuera de las clásicas Madrid y Barcelona. La verdad que este tipo de acontecimientos no favorecen a nadie, suelen ser bastante engorrosos y difíciles de llevar para todas las partes implicadas, sean bandas, promotores, salas y, obviamente, público.
Despertábamos el pasado sábado con la desagradable noticia de la cancelación del concierto de Testament en la sala París 15 de Málaga, al parecer tras diversos fallos en el sistema eléctrico que hicieron imposible la actuación de una de las bandas más emblemáticas del thrash metal de la Bay Area. Es una pena que en pleno siglo XXI todavía sucedan estas cosas en un país, en principio "adelantado" y "moderno" como España, ya que por desgracia no conducen a otro fin que no sea el de empobrecer aún más la, ya de por sí desmejorada, imagen que los artistas internacionales tienen de nosotros. Lo que está claro es que al final en este tipo de situaciones siempre perdemos los mismos, siempre nos llevamos los palos los que de verdad amamos y sentimos con el corazón y el alma esta música. Sabemos de gente que recorrieron muchos kilómetros para estar el pasado Viernes en Málaga y para poder disfrutar de una de sus bandas favoritas o de muchos otros que se hacían una mínima ilusión (y por qué no decirlo, "esperanza") de tener por fin en su ciudad un concierto de notoria relevancia y envergadura, que raramente puede verse fuera de las clásicas Madrid y Barcelona. La verdad que este tipo de acontecimientos no favorecen a nadie, suelen ser bastante engorrosos y difíciles de llevar para todas las partes implicadas, sean bandas, promotores, salas y, obviamente, público.
Nosotros esta vez tuvimos más suerte que muchos de nuestros lectores andaluces ya que el Jueves 21 de Mayo Testament y Exodus sí que pudieron dar un concierto a la altura de lo que se espera de dos de los "masters" de la Bay Area de San Francisco. La sala elegida en esta ocasión en Madrid para disfrutar de una de las noches más thrashers del 2015 fue la céntrica Arena, sita en pleno epicentro de la Capital. Con una entrada más que aceptable (la segunda planta permaneció abierta y hacía mucho tiempo que no la veíamos así en un concierto de metal) la gente se mostraba ansiosa por disfrutar de los sonidos más duros y emblemáticos que surgieron en el Oeste de los Estados Unidos en los primeros años de la que es para algunos de nosotros la auténtica década prodigiosa de la música; los 80. Como primer apunte diré que me gustó más el concierto de Exodus que el de Testament, con un Souza glorioso, demostrando que está en un momento de forma fantástico, cantando a la perfección los grandes clásicos de la banda como "Bonded By Blood" o "Toxic Waltz", así como otros más modernos como "Blacklist" o "Black 13"...
Mención especial para "Strike Of The Beast", el gran éxito que se incluía en uno de los discos más grandes del thrash metal, "Bonded By Blood", y que desde hace mucho tiempo cierra todos y cada uno de los conciertos de los californianos. Ya lo vivimos hace unos años en la gira que traía a los de Richmond por España, aquella vez junto a los helenos Suicidal Angels y sus compatriotas Heathen y Death Angel. En aquella ocasión, y también en la Sala Arena, la actuación de los de Gary Holt no nos gustó tanto, y no porque Gary estuviera con la banda encima de las tablas; tanto entonces como en esta gira, Holt estaba y está ocupado con la que ya es su principal banda, Slayer. En la pasada gira el motivo alegado no fue otro que la banda de Araya y King se encontraba en plena gira americana, mientras que en esta ocasión viene motivada por el hecho de que los de Huntington Park se encuentran dando los últimos retoques a su nuevo trabajo, "Repentless", el cual será editado el próximo 11 de Septiembre por la todopoderosa Nuclear Blast. Esta vez vimos a Lee Altus más metido en la banda, al fin y al cabo no salía al escenario ya cansado de tocar con Heathen. Además, pienso que Rick Hunolt no estaba para grandes hazañas ni logros; si en su momento formó junto a Gary Holt la denominada doble "H", actualmente ha perdido mucha de aquella pericia y de aquella habilidad que mostraba con la guitarra en sus años mozos. Para la presente gira, Exodus decidieron tirar de la mala bestia de Kragen Lum, el cual se entregó en cuerpo y alma, merendándose de un bocado al bueno de Hunolt. Aunque ni que decir tiene que el gran cambio viene dado por el cambio de vocalista, menos mal que Steve Souza decidió regresar a la banda, ya que desde nuestro punto de vista Rob Dukes nunca fue un cantante digno para Exodus, siempre pensamos que Exodus se merecían algo mejor.
Pasaban breves minutos de las nueve y media de la noche cuando tras una breve intro Gene Hoglan, Chuck Billy, Alex Skolnick, Eric Peterson y Steve DiGorgio aparecen sobre el escenario de la sala Arena a ritmo de "Over The Wall", la canción que marcó el devenir de Testament y que abría su debut, "The Legacy" (1987). Canción, que por cierto, al igual que la mayoría del álbum, fue escrita en su apartado lírico por Steve Souza, a quien tan sólo unos minutos antes habíamos visto sobre las tablas con Exodus. Gran espectáculo el que llevan Testament en esta gira, con cañones de luz por todas partes, que a buen seguro a más de uno de la planta superior cegó en más de una ocasión. El set list de la gira europea no es exactamente el mismo que llevaban en el "Dark Roots Of Thrash II Tour" americano, donde la banda de Billy tocaban íntegramente sus dos primeros trabajos, "The Legacy" (1987) y "The New Order" (1988) junto a algún que otro tema de su tercer álbum, "Practice What Your Preach" (1989), y que en la mayoría de las ocasiones venía representado por el corte que abría y daba título a dicha composición.
Tras una larga exposición de los solos de Skolnick y Peterson, demostrando lo buenos y lo grandes que son, de seguido nos sorprenden con el segundo corte de "The Legacy" (1987). Con precisión milimétrica "The Haunting" nos tritura con el ritmo trepidante que Hoglan induce desde la batería, y ello a pesar de que el sonido del que gozaron no fue tan brillante como del que hicieron gala Exodus. No obstante con el tiempo fue mejorando considerablemente, y la voz de Chuck Billy y la guitarra de Skolnick, sensiblemente bajas de volumen en la parte inicial del show, fueron ganando protagonismo y presencia según el concierto avanzaba.
La siguiente en caernos como un mazazo fue "Rise Up", tema de apertura de su último trabajo de estudio hasta la fecha, "Dark Roots Of Earth" (2012). Una canción con mucha fuerza y mucha garra, que en directo se muestra implacable y devoradora, pero que debido a los problemas técnicos no sonó todo lo bien que debería haberlo hecho...lo mismo que "The Preacher", uno de los grandes clásicos que esconde su fantástica segunda obra, "The New Order" (1988) y el cual no te cansas de escuchar una y otra vez a pesar de los posibles entresijos del directo. Aún recuerdo el impacto que me supuso escucharlo en su momento como tema de apertura de su "Live At The Fillmore" (1995) de San Francisco, con una producción exquisita (la mejor de todos los trabajos en directo de Testament) y con mi querido James Murphy a la guitarra principal y Jon Dette (Anthrax, Slayer, Iced Earth, Meshiaak...) a la batería. Sin duda un masterpiece y un clásico que todos los amantes de Testament tienen como gran referente.
Skolnick, que se mostró durante todo el concierto muy afable y locuaz (raro en él), no cesó de moverse de un lado a otro del escenario haciendo gala de su virtuosismo y mostrando su habilidad con sus nuevas signature de ESP. "A Day Of Reckoning" o "First Strike Is Deadly" caen por su propio peso, mostrando con galones y medallas cuáles son los dos mejores álbumes de la carrera de una de las bandas que tenía que haber sido miembro indiscutible del Big Four. Chuck Billy también estuvo muy activo durante todo el concierto, cogiendo púas del micrófono de Alex y tirándolas a un público encendido y hambriento de buena música. Como en todos los conciertos de Testament, uno de los momentos más álgidos llega con "Into The Pit", donde Peterson mete toda la presión y la fuerza con uno de los riffs más rápidos que jamás haya compuesto. Junto a "The Preacher" y "Disciples Of The Watch", "Into The Pit" forma el tridente más afilado y exitoso de "The New Order" (1988)...
"Practice What Your Preach" raramente no suena en cualquier actuación de los californianos, lo mismo que "Disciples Of The Watch", dos temas muy aplaudidos que hacen que DiGorgio luzca con su bajo de tres cuerdas el sonido musculoso y grave de trabajos como "The Gathering" o incluso "Horror Show" de la banda de Jon Schaffer, Iced Earth.... "DNR", mi favorita de "The Gathering", marca el punto más álgido de la parte final de un concierto de una de los grandes de la Bay Area… ¡Grandes!
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