SETLIST: Tread Lightly/ Once More 'Round the Sun/ Blasteroid/ Oblivion/ The Motherload/ Chimes at Midnight/ High Road/Aqua Dementia/ Ol'e Nessie/ Halloween/Aunt Lisa/ Divinations/ Bladecatcher/ Black Tongue/ Ember City/ Megalodon/ Crystal Skull/ Blood and Thunder/
“Open your eyes, take a deep breath and return to life. Wake up and fight, fight for the love and the burning light” y la sala La Riviera se viene abajo en el estribillo de “Tread Lightly”, no es cuestión de suerte, el camino de Mastodon ha sido duro y se han esforzado, no son unos advenedizos, durante hora y media apabullaron con su propuesta a lo largo de dieciocho canciones que se hicieron cortas pero es que podrían haber tocado diez más, se echan en falta grandes ausentes de todos sus discos porque el repertorio de los de Atlanta empieza a convertirse en uno de los pilares del metal contemporáneo. Y es que lo he dicho en muchas ocasiones, Mastodon conservan la mística de todas esas grandes bandas de los setenta y entre sus trabajos no hay ni uno sólo que, a estas alturas, suponga un traspiés en su carrera. Les descubrimos con “Remission” (2002) y “Leviathan” (2004) y seguirles durante esta década ha supuesto un camino lleno de satisfacciones mientras hemos contemplado cómo han ido creciendo y creciendo con cada lanzamiento y cada gira pero su actitud, entusiasmo y entrega no han menguado desde aquel primer concierto suyo en el 2006 durante ”Blood Mountain” (2006) que precisamente supuso la confirmación de lo que nos había maravillado en sus dos primeros trabajos y confirmó que aquello no era un espejismo. Con “Crack The Skye” (2009) se situaron en lo más alto con un disco ambicioso y genial por igual, “The Hunter” les dio la confianza y abrió las fronteras con una propuesta más directa y melódica y “Once More ‘Round The Sun” (2014) es un disco redondo que crece con cada escucha y, sin ser ése cambio radical que prometieron, abona el futuro marcando, sin duda, un pequeño punto de inflexión.
Con un escenario despejado, las pantallas de Hinds y Kelliher escoltando la batería de Dailor, elevada sobre una tarima, los cabezales de las guitarras a los laterales, una lona con la portada del disco y unos láser sobre la pintura de Skinner, Mastodon salieron a por todas tras sonar Queens Of The Stone Age como música ambiente. La desquiciada guitarra de “Tread Lightly” abría el concierto mientras los músicos tomaban sus instrumentos, un estallido y la pista de la sala se convierte en un mar de empujones y brazos en alto. “Once More 'Round the Sun” se despliega sobre nuestras cabezas y con la melódica “Blasteroid”, más acelerada que en el disco, convierten de nuevo la pista en una locura. Con “Oblivion” salimos de “The Hunter” para acabar en “Crack The Skye” pero que nadie se olvide que estamos en la gira del último disco y, por eso, se sacan de la manga “The Motherload” con un Brann Dailor enorme, alternando las voces con Sanders pero cargando sobre sí mismo con todo el peso de la canción, es impresionante ver al batería defenderse mientras entona las estrofas y deja a Sanders los puentes. “Chimes At Midnight” y de vuelta a ponerlo todo patas arriba con “High Road” que resulta ser una de las más celebradas por el público y resuena de manera épica por toda la sala.
Con un escenario despejado, las pantallas de Hinds y Kelliher escoltando la batería de Dailor, elevada sobre una tarima, los cabezales de las guitarras a los laterales, una lona con la portada del disco y unos láser sobre la pintura de Skinner, Mastodon salieron a por todas tras sonar Queens Of The Stone Age como música ambiente. La desquiciada guitarra de “Tread Lightly” abría el concierto mientras los músicos tomaban sus instrumentos, un estallido y la pista de la sala se convierte en un mar de empujones y brazos en alto. “Once More 'Round the Sun” se despliega sobre nuestras cabezas y con la melódica “Blasteroid”, más acelerada que en el disco, convierten de nuevo la pista en una locura. Con “Oblivion” salimos de “The Hunter” para acabar en “Crack The Skye” pero que nadie se olvide que estamos en la gira del último disco y, por eso, se sacan de la manga “The Motherload” con un Brann Dailor enorme, alternando las voces con Sanders pero cargando sobre sí mismo con todo el peso de la canción, es impresionante ver al batería defenderse mientras entona las estrofas y deja a Sanders los puentes. “Chimes At Midnight” y de vuelta a ponerlo todo patas arriba con “High Road” que resulta ser una de las más celebradas por el público y resuena de manera épica por toda la sala.
Tras la locura de “Aqua Dementia” y nuestra vieja amiga “Ol'e Nessie” (con esas guitarras magníficas que la abren y sus constantes cambios de ritmo que nos llevan a "Remission"), llega el turno de “Halloween” con Hinds como protagonista mientras aporrea una bonita Gibson SG (hasta ese momento había usado su Flying V, Kelliher no se desprendió ni un solo momento de su nueva Gibson Les Paul Signature, tan sólo en alguna canción coqueteó con su Les Paul en Alpine White, y Sanders con su bajo Fender Jaguar en Silverbust), “Halloween” gana en directo y su estribillo funciona; "You will find spirits never rise. Without warning, feel your fate as you come alive. They're here to take you hoooome", tanto como sus progresiones, parones y acelerones o sus abrasivos solos, sin duda una de las mejores de "Once More 'Round The Sun" y pasan de puntillas por “Aunt Lisa” para acabar en “Divinations” con toda la sala coreando; "No escapeeeeeeeeeee, biiiiiiiiiiiinding spirits" y “Bladecatcher” antes de arrancarse con el oscuro riff de “Black Tongue” de “The Hunter” y acabar el grueso del concierto con “Ember City”. El grupo está espléndido, Hinds aulla mientras Sanders disfruta del escenario campando a sus anchas y canta las partes más agresivas, Kelliher es el más tranquilo y alterna los solos, doblándolos en muchas ocasiones con su compañero, Hinds, mientras Dailor golpea con fuerza los parches y hace las voces más melódicas de todo el repertorio.
Abren los bises de manera fulgurante con “Megalodon” y “Crystal Skull” para dejar las cosas claras y, por si había algún despistado que dudase a estas alturas de su directo, arremeten con un “Blood And Thunder” agresivo y arenoso, como si el mar nos castigase en un constante vaivén de restos de madera, sangre y arpones. Así se escribe la historia y Mastodon llevan labrando su leyenda más de una década.
© 2014 Hal Incandenza