Concierto: Paradise Lost (Madrid) 25.05.2012

SETLIST: Desolate (intro)/ Widow/ Honesty in Death/ Erased/ Pity the Sadness/ Soul Courageous/ In this dwell/ As I Die/ One Second/ Fear of Impending Hell/ Faith Divides Us - Death Unites Us/ Tragic Idol/ Say Just Words/

Después de perder el tiempo asistiendo al circo de Limp Bizkit (llegando tarde al  místico y maravilloso concierto de Kyuss Lives!), aburrirnos soberanamente con una actuación tediosa hasta la nausea por parte de los caducos Soundgarden, sufrir el desastroso sonido y el absurdo repertorio elegido por parte de Machine Head, tendríamos un último atisbo de lucidez durante el concierto de The Offspring y, cuando los norteamericanos entonaban por vez vigésimo séptima "Bad Habit" en nuestro país, un servidor abandonó las primeras filas del "Black Circle" y huyó despavorido (quizá sabiendo que lo que los californianos ofrecerían sería más de lo mismo) hacia el segundo escenario en donde los técnicos preparaban las sobrias lonas con el logo del grupo de Halifax y creo que nunca me he alegrado tanto de tomar esa decisión. Por lo que sé, The Offspring hicieron otra vez lo mismo, repitieron éxitos con algún que otro tema nuevo y ofrecieron lo de siempre. 

No es que tenga nada en contra de Dexter Holland y Noodles, me hicieron pasar grandes momentos de diversión durante mi adolescencia pero ya está, eso ya pasó y, aunque "Smash" (1994) es perfecto, éste es el clásico ejemplo de un grupo que debería haber fallecido en un accidente de avión después de publicar "Ixnay on the Hombre" (1997), actualmente no tienen nada que decir a pesar de que en directo sigan ilusionando a los adolescentes que les han descubierto hace un par de discos y emocionando a todos aquellos treinteañeros que asisten a sus conciertos como lo hacen nuestros hermanos mayores con Simple Minds; por el mero placer proustiano de volver a la juventud y recuperar el tiempo perdido a través de los recuerdos que sus ramplonas canciones de poco más de tres minutos les evocan, sin duda ayudados por la cerveza y las horas de recalentamiento al sol del festival. Doy por zanjada la discusión sobre la estéril carrera de The Offspring, la bizarra comparación con los actuales Simple Minds y sonrío plácidamente mientras recuerdo a Paradise Lost.



Holmes y MacKintosh deberían estar orgullosos porque "Tragic Idol" (2012), sin llegar a ser la piedra filosofal, es un disco enorme y duro como una roca, robusto en sus composiciones y con cierto encanto modernista (que no moderno, ojo) sin olvidar el dramatismo de sus letras y los punzantes solos llenos de sentimiento y melancolía marca de la casa. "Tragic Idol" es la confirmación de que Paradise Lost están en buena forma y tienen mucho que decir, el legado de un grupo que sigue luchando y da lo mejor de sí mismo. ¡Y vaya si lo demostró en nuestra edición del Sonisphere! 

Mientras, de fondo, sonaban las saltarinas quintas de cualquier canción de The Offspring, el segundo escenario se llenaba de más y más oscuridad, luces azuladas (casi moradas), las ilustraciones de "Tragic Idol" y nuestro viaje comenzaba con "Widow", la gente salta y sigue a Holmes, suenan contundentes, voraces, con garra y arrolladores. No son el típico grupo que salta y hace los famosos "devil horns", Paradise Lost están por encima de todo eso, su música refleja la tragicomedia humana de nuestros días y se mezcla con el purísimo y férreo sonido que sólo un grupo inglés es capaz de desplegar en un escenario y es que con, seguramente menos potencia que Machine Head, menos expectación que Soundgarden (digámoslo sin miedo: ¡menuda mierda de concierto!), menos luces que The Offspring y menos maquillaje y "scratches" que Limp Bizkit , Paradise Lost protagonizó junto con Kyuss Lives! una de las mejores actuaciones del festival. Eso sí, sobria hasta la médula (como son ellos) y para un público con las ideas mucho más claras que aquellos que se tiraban la cerveza los unos a los otros y estúpidamente bailaban al ritmo de una canción tan vergonzosa como "Pretty Fly (for a White Guy)"

El single, "Honesty in Death" suena épico e inmortal en mitad de la noche (su guitarra machacona es el mejor remedio para cualquier mal), el piano de "Erased" anima a todos los allí presentes y todos, o casi todos, corean la canción. "Pity the Sadness" no es peor recibida y parece que el cielo se vaya a desplomar sobre nuestras cabezas. Con "As I Die" demuestran que se han metido a todo el público en el bolsillo con una canción tan gótica y densa en directo como en estudio. La evocadora "Tragic Idol" suena bien pero es en "One Second" (¡qué emocionante, por favor!) en donde me doy cuenta de que estoy en el lugar apropiado. "Faith Divides Us - Death Unites Us" se despereza sobre nosotros mientras Holmes la canta parsimoniosamente, sabiendo de su triunfo y, para acabar y ya con todo el equipo de Blogofenia reunido, rematan la actuación con un "Say Just Words" por el que no pasan los años y con el que sí que nos hicieron retroceder en el tiempo y recuperar la juventud. La diferencia es que Paradise Lost ha envejecido bien, como el buen vino. Era viernes, faltaba toda la jornada del sábado y teníamos la certeza de que quizá ya habíamos visto las dos mejores actuaciones del festival.

© 2012 Jack Ermeister