Sorprendente unión entre Scott Ian y Rob Caggiano de Anthrax, con Joe Trohman y Andy Hurley de Fall Out Boy, Keith Buckley y Josh Newton de Every Time I Die que han firmado uno de los discos del año, tomando su nombre del clásico Black Betty de Ram Jam.
The Damned Things ha conseguido lo que los últimos discos de Anthrax no lograba; aunar éxito de público y crítica. Pegajoso, fresco y contundente. We'Got The Situation Here fue elegido como primer single de este supergrupo y, a juzgar por los resultados, no les podía haber ido mejor.
Handbook for the Recently Deceased apesta a rock clásico pero con guitarras endurecidas y el bajo galopando tras una voz que brilla con luz propia en los estribillos, acariciando en ocasiones el punk y dejando atrás todo rastro de esencia alternativa o emo.
Bad Blood (con unos curiosos arreglos) es quizá la más comercial, el estribillo es cien por cien radiable. Friday Night es rápida y concisa, con una melodía estupenda y unas guitarras muy trabajadas como muestra su solo.
Bad Blood (con unos curiosos arreglos) es quizá la más comercial, el estribillo es cien por cien radiable. Friday Night es rápida y concisa, con una melodía estupenda y unas guitarras muy trabajadas como muestra su solo.
El blues de Black Heart y una voz arrolladora bajo unos patrones bluesy que se transforman en un gran tema metal al llegar al estribillo. A Great Reckoning, un medio tiempo claramente pop. Llevamos seis canciones y las seis son singles potenciales, llenos de fuerza y tintes metálicos revestidos del mejor pop y rock.
Little Darling, con un buen riff sirve de intro a la canción más dura del conjunto, Ironiclast suena bien y lleva de forma digna el nombre del álbum con unas buenas guitarras y un gran bajo. Por fin, uno entiende qué hace Scott Ian en este grupo; Graverobber podría haber sido firmada por Anthrax.
Y para cerrar The Blues Havin' Blues con dos excepcionales guitarras y una batería que hace un trabajo soberbio para poner el broche final a un disco, magníficamente producido, que no debería pasar desapercibido, que podía haber sido mucho mejor pero que nos ha sorprendido a todos y para bien.
Y para cerrar The Blues Havin' Blues con dos excepcionales guitarras y una batería que hace un trabajo soberbio para poner el broche final a un disco, magníficamente producido, que no debería pasar desapercibido, que podía haber sido mucho mejor pero que nos ha sorprendido a todos y para bien.
© 2011 Jesús Cano